La fidelidad inalámbrica (WiFi, por su abreviatura en inglés) conecta a los aparatos del usuario final al servicio local de Internet mediante una tecnología inalámbrica de corto alcance. La movilidad de la WiFi permite a los usuarios trasladar los aparatos conectados vía WiFi en sus hogares o empresas sin que estos pierdan la conexión a Internet. Los servicios WiFi también están disponibles ampliamente, en numerosas áreas públicas, conocidas en inglés como "hot-spots". Las tecnologías inalámbricas fijas, que usan equipos direccionales de mayor rango, pueden proveer servicios de banda ancha en áreas remotas o de baja densidad de población, donde otro tipo de banda ancha sería de costo demasiado alto para proveerla. Hay otros servicios de banda ancha inalámbrica disponibles ampliamente, ofrecidos por proveedores de banda ancha móvil. El servicio de banda ancha móvil es típicamente màs lento que las alternativas de planta fija o inalámbrica fija.
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